MIAMI, FLORIDA, UNITED STATES, March 28, 2022 /EINPresswire.com/ — Durante el discurso sobre el Estado de la Unión, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, destacó la importancia de imponer un impuesto de 15% a las grandes corporaciones, muchas de las cuales evadieron al fisco a pesar de sus grandes beneficios obtenidos, según el mandatario. Sobre el tema, Carlos Dorado, presidente de Italbank y vicepresidente de Italcambio, reflexionó con el Observador Latino.
«Conseguimos que más de 130 países acuerden una tasa impositiva mínima global para que las empresas no puedan dejar de pagar sus impuestos en casa enviando empleos y fábricas al extranjero», aseguró el mandatario.
Mencionó Biden que «el año pasado, 55 corporaciones de Fortune 500 obtuvieron $40 mil millones en ganancias y pagaron cero dólares en impuestos federales sobre la renta. Eso simplemente no es justo».
Todos los años, Fortune 500 enumera las 500 compañías más grandes de Estados Unidos, de acuerdo a los ingresos totales y en 2021, de acuerdo a sus análisis, más de 50 de ellas pagaron cero al fisco por la diferencias en ingresos contables y los ingresos fiscales.
Y aunque Biden habla de evasión de impuestos, el economista y empresario Carlos Dorado, dice que se trata de «eficiencia fiscal». En su criterio, no se puede decir que las grandes corporaciones evaden impuestos, sino que aprovechan la ley y sus fisuras, junto a profesionales fiscalistas internacionales que establecen estrategias oportunas, con un resultado de pago mínimo de impuestos y en la mayoría de los casos cero.
Sobre el pago cero de la lista Fortune 500 EE.UU., Carlos Dorado, asegura que «no se trata de un tema legal sino de un tema moral. Si queremos ser una sociedad sólida y fuerte, tenemos que potencializar la clase media, y que no haya unas desigualdades tan abrumadoras».
Voluntad de lograrlo
El presidente Biden con su discurso incomodó a muchos empresarios y ahora, es un tema importante para la realidad económica estadounidense. «Se tiene que enfrentar y resolver de forma urgente», explicó Carlos Dorado.
Sobre el control, se están dando pequeños pasos, como la aprobación por parte de los ministros de Finanzas y presidentes de los bancos centrales de los países que forman el G-20, quienes se reunieron el 09 de julio del 2021 en Venecia, para imponer una tasa global a las compañías multinacionales con una facturación superior a los 750 millones de dólares al año, con el objeto de poner fin al fenómeno de la baja o nula tasación, de las que estas compañías se han beneficiado hasta la fecha.
Las economías que integran el G20 acumulan el 0% del Producto Interno Bruto (PIB) mundial, por lo que es «un buen comienzo», destacó Carlos Dorado.
«No podemos olvidar que estamos en un mundo globalizado e interconectado, en la que se busca producir en países donde los costos son más bajos. A través de transferencia de costos e ingeniería fiscal, se logra un grado de eficiencia impositiva, como la descrita, donde se ganan 40 billones y se paga cero de impuestos», señaló.
Carlos Dorado considera que la supervisión debe estar encaminada en dos rumbos: a nivel global, donde haya una tasación universal común, y otro en el ámbito de cada nación, donde esa eficiencia fiscal sea revista a través del cambio de leyes.
«Pero no podemos olvidar, una vez más, que se tocan muchos intereses y su implementación no es nada fácil. El hecho que el presidente de la primera economía del mundo lo exponga en un acto tan importante como es el Discurso a la Unión, diese la impresión de que hay una voluntad política de lograrlo», indicó.
-Si reducían ciertos gastos de los ingresos imponibles en construcciones o pagos de opciones sobre acciones de los empleados, ¿por qué es evadir?
-Creo que hay que ser realistas y pragmáticos, en el sentido de que las empresas públicas tienen que reportar ganancias a sus accionistas, si quieren ver subir su valor. Bajo esta premisa de maximizar utilidades, se harán todas las estrategias posibles y necesarias para maximizar las ventas, minimizar los costos, para aumentar las utilidades. Una de las voces más relevantes es el pago de los impuestos, por lo cual se buscan a los mejores asesores fiscales internacionales para ser lo más eficiente posibles. ¿Es legal? Sí. ¿Es justo y moral? No.
En ese sentido, los gobiernos y los legisladores deben intervenir, pues su objetivo principal no es el mismo de los accionistas, sino de lograr mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos.
«Los objetivos de ambos deben encontrar un punto de equilibrio, en el sentido de no frenar el crecimiento económico del sector empresarial, pero al mismo tiempo tener una sociedad más justa e igualitaria», señaló Carlos Dorado. «Es encontrar ese punto de equilibrio donde se ha fallado, en parte por el lobby tan importante que ejerce el poder económico. ¡Pero eso no puede seguir así!».
En reflexión de Carlos Dorado
«¿Qué pensará un bombero de New York, o un empleado de una compañía, cuando ve que pagó más impuestos que una compañía que ganó setenta millones de veces más que él y por encima no pagó nada?¿Frustración? ¿Rabia? ¿injusticia? Si queremos como sociedad, garantizarnos un futuro de paz social, hay que reducir las desigualdades económicas, con inteligencia y pragmatismo.
Esto debe ser un objetivo mundial a corto-mediano plazo, y si no contamos con políticos que tengan esa visión y ese pragmatismo, y seguimos aumentando las desigualdades sociales dentro de una sociedad donde cada día hay menos que tiene mucho, muchos que tienen poco y una sociedad media en vías de extinción, estamos creando el caldo de cultivo ideal para las revoluciones y el caos social.
Una gran mayoría de clase media educada es la mejor garantía de un futuro estable, vanguardista y prometedor».
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